Emociones inteligentes o Inteligencia emocional

¿Las emociones son inteligentes o la inteligencia es emocional? Esta pregunta nos lleva a sentir que puede ser lo mismo pero en sentido contrario, sin embargo, hoy más allá de ver los conceptos quiero llevarte a ver esta reflexión como una oportunidad para llevar a tu rutina diaria el manejo de las emociones y el acompañamiento activo, directo e indirecto que tenemos con nuestros peques.

Se escucha mucho de la importancia de la inteligencia emocional, como adultos vemos cómo día a día en nuestra proyección profesional es una habilidad que ha tomado una importancia inmensa y que cada día muestra como es necesaria para fomentar el trabajo en equipo, la productividad, el liderazgo, etc. En un artículo anterior hablamos que la inteligencia emocional SI es una cosa de niños y lo valioso que es darles la oportunidad de potenciarla y desarrollarla desde temprana edad, sabiendo que es una habilidad que entre más se practique mejores resultados se van a obtener.

¿Qué es primero?

A todas estas qué es primero, la inteligencia emocional o las emociones inteligentes… es una de las preguntas que me gusta hacerle a las familias que acompaño para dejar un poco atrás el piloto automático con el que solemos estar.. Algunos me dicen que es lo mismo, otros dicen que las emociones inteligentes y otros que la inteligencia emocional es lo único válido.. Me encantaría saber qué piensas tú.. porque ese primer concepto, idea y opinión que tenemos de una pregunta que nos hacen es una base muy importante para entender el contexto y la forma como podemos manejar y desarrollar nuestra mentalidad de algún tema.


Para mi son cosas diferentes, una cosa son las emociones inteligentes y otra es la inteligencia emocional, sin embargo, las dos son muy valiosas e importantes en las relaciones interpersonales que tenemos a diario.. Personalmente siento que uno de los conceptos es de carácter interno y el otro está más ligado con nuestro contexto externo.

Las emociones inteligentes son aquellas que nos permiten entenderNOS y la inteligencia emocional es la que nos permite entenderLOS.. 


¿Qué son las emociones?

Nuestras emociones son el mecanismo que tiene nuestro cuerpo para avisarnos como estamos, activar los impulsos de supervivencia, liberar las hormonas que nos generan ciertos eventos o situaciones de la vida.. En otras palabras, las emociones son el idioma del cuerpo para procesar el pensar, sentir, decir y hacer. Si logramos gestionar las emociones, conocernos y validarnos vamos a poder mantener el equilibrio y control de las situaciones.

Cuando se nos presenten las situaciones extremas, positivas o negativas, pero los extremos son los que nos llevan a las reacciones impulsivas y conociendo nuestras emociones inteligentes vamos a poder gestionar mejor las reacciones. Aquí se abarcan temas como el autoestima, autocontrol, resiliencia, autocuidado, meditación.

Ahora la inteligencia emocional está más ligada a la forma como nos relacionamos con otras personas, aquí toma un papel muy importante la empatía, la escucha activa y la comunicación asertiva.

Cuando aplicamos la habilidad de la inteligencia emocional podemos soltar el tomarnos personal las cosas, las acciones reactivas, pasamos a escuchar no sólo las palabras sino el lenguaje no verbal del otro, tenemos la oportunidad de usar o no un silencio consciente, de reconocer cuando como y con quien debemos hablar para encontrar soluciones y no aumentar los conflictos.

¿Cuál va primero?

Que si una es primero que la otra, personalmente pienso que primero son las emociones inteligentes porque finalmente no podemos dar o ser de lo que no tenemos o somos.. Sin embargo, las dos son habilidades muy importantes que si las sabemos cultivar y desarrollar vamos a ver como los conflictos con los que nos afrontamos día a día con nuestros hijos reducen su frecuencia y su intensidad.

Lograr que nuestros niños sientan que son comprendidos y que lo que sienten es interpretado y nombrado como corresponde, les va construyendo la seguridad necesaria para comunicarse cada vez de una forma más asertiva. Como adultos referentes tenemos la hermosa labor de ser traductores de las emociones de nuestros hijos y acompañarlos en ese proceso de autoconocimiento que los empodera y ayuda a formarse para los retos del futuro a los que se tienen que enfrentar en el futuro.

La inteligencia emocional es una habilidad que se puede implementar y practicar desde muy temprana edad, si quieres conocer más del tema puedes leer el articulo «La inteligencia emocional SI es cosa de niños»

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